Formadas por procesos geológicos a lo largo de millones de años, representando la historia de la Tierra en sus capas y composiciones, las piedras naturales varían en tipos y características. Desde las piedras ígneas, formadas por el enfriamiento del magma, hasta las piedras sedimentarias, resultado de la deposición y compactación de sedimentos, y las piedras metamórficas, alteradas por una intensa presión y temperatura. Exuberantes por sí mismas, son obras únicas formadas por la naturaleza.